domingo, 12 de enero de 2014

El hombre vive como piensa y piensa como produce : La delincuencia un problema real.

Empezare este articulo con una frase de Lenin que dice : “la verdad es siempre revolucionaria”, el deber de nosotros los revolucionarios es buscar la verdad y anunciarla .

El reciente asesinato a la actriz Mónica Spear ha causado un gran revuelo mundial no solo mediático, hoy esta es la conversación por preferencia de los venezolanos, todos dan su apreciación sobre el tema y por las lecturas a artículos , comentarios en redes sociales, discusiones en bares, me he dado cuenta que lastimosamente este debate lo esta ganando la derecha y no precisamente por su brillantez , ni por el buen trabajo de posicionar matrices de opinión por parte de los medios de comunicación, la razón por la que la derecha está ganando este debate es por la especificidad y falta de objetividad con que desde el campo anti imperialista se ha dado respuesta al tema.

Los revolucionarios no podemos hacer análisis chimbos que aborden solo una parte del problema, pretender  justificar lo injustificable, al contrario, los errores y las deficiencias debemos atacarlos aun con mayor fuerza los revolucionarios que el propio enemigo, basta ya de análisis que pretenden servir como escudo a un problema real, que se queda solo en la superficialidad del problema pero no analizando la esencia sera entonces un escudo blando , un escudo de papel .

El problema de nuestros análisis es que nos alejamos del marxismo, el marxismo no es fraseología discursiva,el marxismo es un método científico para el análisis concreto de la realidad concreta y para transformarla , por eso es importante conocer las leyes generales de la dialéctica y sus categorías, nuestros análisis deben analizar no solo el fenómeno también la esencia del problema, lo particular y lo general, el contenido y la forma, la causa y el efecto, la necesidad y la casualidad , la posibilidad y la realidad, si nos alejamos del marxismo nos equivocaremos una y otra vez abordando los problemas superficialmente y no desde su fondo.

Lo primero que debemos hacer para solucionar el problema de la delincuencia en el país es asumir que es un problema que nos afecta a todos,  a los trabajadores que roban en el transporte publico( los roba el patrón y los choros).

Todo ciudadano común ha sido víctima o conoce a alguien que fue víctima del hampa con mayores o menores consecuencias y repercusión, por lo que no se puede este problema minorizar, pretender decir que no ocurre o que es mediático, echarle la culpa a terceros como la violencia de la televisión o los juegos de vídeos y no asumir las responsabilidades propias, al hacer esto usamos escudos de papel y estamos perdiendo la batalla y no me refiero solo al gobierno nacional, también me refiero al movimiento popular y revolucionario que debe también dar respuesta y organizar a la población contra este grave flagelo.

En los análisis que he leído se busca abordar el problema siempre desde la súper-estructura, se dice que es un problema cultural por culpa de la televisión, las redes sociales, los vídeo juegos, otros dicen que es un problema de ley y que es necesaria la aplicación de la pena de muerte, otros hablan de deficiencia en los cuerpos policiales, otros culpan a la familia, algunos a la falta de religión, pero poco se habla de lo que para mi es fundamental que es el carácter rentista , parasitario y netamente comercial de nuestra economía.

Carlos Marx nos enseño :” El modo de producción de la vida material condiciona el proceso de la vida social política y espiritual en general. No es la conciencia del hombre la que determina su ser sino, por el contrario, el ser social es lo que determina su conciencia.”

En base a esa enseñanza nosotros debemos entender que el comportamiento social, la estructura familiar, la cultura, está ligado estrechamente a la base económica de la sociedad.

Somos un país donde no existe cultura ni disciplina del trabajo , el método de acumulación de riquezas en Venezuela no es precisamente el trabajo productivo, el método de acumulación de riquezas en nuestro país desde la aparición del petrolero ha sido el robo a la renta petrolera, por ende tenemos una sociedad que se ve en la obligación de para sobrevivir buscar apropiarse de parte de la renta , por ello los altos niveles de corrupción, formación de mafias de todo tipo, el venezolano y la venezolana tiene un comportamiento social determinado por una economía capitalista altamente parasitaria y eso se debe a que el hombre vive como piensa y piensa como produce.

Un ejemplo claro es de como en las zonas campesinas del país los niveles de delincuencia son menores, los campesinos tienden a ser mas disciplinados, puntuales y responsables que el hombre y la mujer de la ciudad, es el temple y la disciplina del trabajo del campo que condiciona el comportamiento y pensamiento del hombre y la mujer.

La delincuencia es un problema social estructural que no se solucionará en el marco del sistema, el cual debemos analizar desde sus raíces económicas y entender de una vez que ni con la ley de desarme, ni con mas efectivos policiales, ni con miles de planes de seguridad podremos darle una verdadera solución a este flagelo si no se ataca el problema desde su raíz principal.

La economía Capitalista rentista venezolana produce altos niveles de descomposición social, la proliferación del lumpen proletariado en nuestro país es mayor que en el de cualquier otro país capitalista.

¿Qué es el lumpen proletariado?

“Es aquella parte de la clase obrera que queda fuera del proceso de producción y socialmente marginada.

El capitalismo crea un voluminoso ejército industrial de reserva, al tiempo que el pauperismo de la población crece progresivamente. Las crisis golpean periódicamente con fuerza a la clase obrera engendrando un importante sector de la población colocada en la miseria, sin expectativas ni esperanzas de ningún tipo que debe recurrir a toda clase de subterfugios para poder sobrevivir en unas condiciones lamentables. Ellos son el colchón que amortigua las caídas y evita que el sistema se rompa en pedazos.

El lumpen-proletariado crece al mismo ritmo que la acumulación capitalista. Por eso, lo que en un polo es acumulación de riqueza es, en el polo contrario, es decir, en la clase que crea su propio producto como capital, acumulación de miseria, de tormentos, de esclavitud, de despotismo, de ignorancia y degradación moral. Este sector social desempeña un papel económico fundamental y no es ningún residuo desechable. No son los despojos que va arrojando la sociedad en su marcha: es también uno de los motores de esa marcha; la marginación no es algo accesorio, prescindible, una secuela indeseada sino una pieza fundamental en el funcionamiento del sistema productivo capitalista. En contra de la lógica asistencial, los presupuestos de bienestar se incrementan en las fases de auge económico y se contraen en las de crisis, que es cuando deberían ser más cuantiosas. Lo que la clase dominante da y lo que la dominada necesita no son correlativos en absoluto. No hay políticas económicas capaces de erradicar la marginación social, porque es un fenómeno consustancial a esta sociedad que interesa promover como fuerza de choque contra los trabajadores. Así ha sido históricamente hasta hoy mismo: la caridad, la beneficencia y los servicios sociales es lo que siempre han pretendido. La política social es la otra cara de la política represiva: no es algo distinto sino más de lo mismo, una continuación de lo mismo.

El lumpen proletariado es extraordinariamente vulnerable y, por ello, es en su seno donde la burguesía ha reclutado la carne de cañón imprescindible para sofocar cualquier rebelión dirigida contra su dominio. La legión de los excluidos no se caracteriza, pues, por su inadaptación, sino por su exceso de adaptación precisamente. Nadie está más aferrado a los valores y símbolos capitalistas que sus primeras víctimas, quienes han padecido en sus carnes con toda crudeza la dialéctica del amo y el esclavo. No se trata sólo de un sector social desclasado sino privado de su conciencia de clase y, en consecuencia, el más expuesto al bombardeo mediático: todas las taras ideológicas de la sociedad actual se manifiestan más acusadamente entre estos desplazados entre los que la burguesía suele reclutar sus fuerzas de choque.”* (extraído de la pagina censurada Antorcha.org)

La experiencia de todas las revoluciones nos dan lecciones de como esta capa de la sociedad siempre ha sido enemiga de las mismas , acá este extracto de Engels sobre la experiencia de los obreros en la comuna de París :

"El lumpemproletariado, esa escoria integrada por los elementos desmoralizados de todas las capas sociales y concentrada principalmente en las grandes ciudades, es el peor de los aliados posibles. Ese desecho es absolutamente venal y de lo más molesto” estos elementos viven como sabandijuelas que chupan y viven del trabajo de los obreros, . Cuando los obreros franceses escribían en los muros de las casas durante cada una de las revoluciones: «Mort aux voleurs!» ¡Muerte a los ladrones!, y en efecto fusilaban a más de uno, no lo hacían en un arrebato de entusiasmo por la propiedad, sino plenamente conscientes de que ante todo era preciso desembarazarse de esta banda. Todo líder obrero que utiliza a elementos del lumpemproletariado para su guardia personal y que se apoya en ellos, demuestra con este solo hecho que es un traidor al movimiento."

Lo que me plantee en este articulo no es ni mucho menos creer que este breve análisis contiene la solución y la cientificidad necesaria sobre este gran problema que nos aqueja , solo pretende abrir otra perspectiva al debate y buscar la manera de que se realice de una manera mas científica y profunda una investigación real y necesaria sobre este problema.

Si eliminamos los juegos bélicos, se prohíben las series violentas, se aumentan los efectivos policiales, se implementa la pena de muerte, se diseñan arduas campañas para la conciencia, se elaboran nuevas leyes contra el crimen y un conjunto de formulas para reducir la criminalidad pero no se ataca el capitalismo rentista que produce : altos niveles de corrupcion, impunidad, consumismo, desempleo estructural, mafias, narco-trafico, entre otros, ¿podremos solucionar el problema de la delincuencia?

Otra cosa a la que me quería referir en este articulo es al gran error de subestimar el asesinato de dicha actriz y decir que nadie hizo revuelo por el asesinato al Cacique Sabino y aunque estoy de acuerdo que el asesinato a Sabino fue altamente silenciado, creo que es un error meter manzanas y peras en un solo saco y contarlos como lo mismo.

El asesinato de Sabino fue un asesinato de índole política y el de la actriz por un grave problema social de inseguridad y de delincuencia común, por ende creo que ambos deben causar indignación para los revolucionarios, el primero porque hoy en un proceso que se auto denomina revolución bolivariana se sigan persiguiendo y se cometan crímenes contra el movimiento obrero, campesino, de indígenas impunemente y el segundo porque lo primero que debe hacer un proceso revolucionario es eliminar el flagelo de la delincuencia y el crimen organizado, como lo han enseñado las experiencias de todas las revoluciones proletarias del mundo.

Este debate sobre la delincuencia me hizo recordar esta reflexión de Fidel Castro : "Hay que combatir el delito común con la educación y con la represión, con las dos cosas; con la ley y con la aplicación consecuente de la ley, si no, resulta que habremos derrotado al imperialismo, y los ladrones casi nos van a derrotar a nosotros"

El impulso de una nueva política económica para la industrialización , el desarrollo agrícola y la diversificación de la economía venezolana que nos permita superar el capitalismo rentista y parasitario vigente debe ser parte primordial para nuestra discusión hoy sobre el tema de la delincuencia.

Eleazar Melo

Militante de la JCV

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